Diálogo

Proyecto de ley busca reducir jornada laboral: La discusión de las 40 horas

Los efectos de restar cinco horas a las actuales 45 de trabajo semanal, tanto para el sector laboral como el productivo, son sometidos a análisis a través de variables como flexibilidad, tiempo y calidad.  Por Érico Soto M. Un cambio radical en la forma de vivir y organizar el trabajo es el que propone el […]


Los efectos de restar cinco horas a las actuales 45 de trabajo semanal, tanto para el sector laboral como el productivo, son sometidos a análisis a través de variables como flexibilidad, tiempo y calidad. 

Por Érico Soto M.

Un cambio radical en la forma de vivir y organizar el trabajo es el que propone el proyecto de ley que busca reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales. Aunque su discusión continúa en la Comisión de Trabajo del Senado, se analizan las indicaciones presentadas para modificar la moción inicial, mientras se escuchan voces de distintos sectores productivos, como trabajadores y académicos.

La propuesta fija una gradualidad de cinco años para todo tipo de empresas. Así, la primera rebaja sería a 44 horas semanales al primer año de publicado el proyecto de ley, 42 horas semanales a partir del tercer año, y 40 horas al quinto año. 

Características

Sobre las ventajas y desventajas del proyecto, el abogado Boris Fiegelist, director de Derecho de U. Andrés Bello sede Concepción, sostiene que el objetivo declarado es mejorar la calidad de vida de los trabadores chilenos, mediante la reducción de la duración máxima de la jornada laboral legal, lo cual ha sido una tendencia en países más desarrollados. 

“El riesgo que puede representar es el impacto en la productividad, que en Chile es un hecho irrefutable que es muy baja, y el eventual incremento de costos para algunas pequeñas y medianas empresas que pudiesen verse obligadas a contratar más personal para mantener sus operaciones. Sin embargo, creemos que esto a lo menos se encuentra mitigado por las excepciones y el régimen de implementación transitorio que el mismo proyecto establece”, señaló.

Por su parte, la académica de la Facultad de Derecho UCSC, Yenny Pinto, destaca que Chile se encuentra entre los países con más horas de trabajo en promedio, porque de acuerdo con los datos entregados por la OCDE para 2021 son 1.916 horas anuales, es decir, un 11, 7% por sobre el promedio de los países que integran la organización. Y que más del 70% de los países miembros de la OCDE ya han establecido el límite legal de las 40 horas o menos de jornada laboral. 

“En las ventajas, podemos mencionar los impactos directos en la salud y bienestar de los trabajadores, permitiendo mayor espacio para un adecuado descanso y recuperación, lo que disminuye la fatiga, los errores, la accidentabilidad, el ausentismo y los conflictos entre la vida personal y laboral”, señala Pinto.

Asimismo, sobre una implementación escalonada por parte de las empresas, contemplando un plazo de cinco años, explica que habría excepciones: “Salvo el caso de las jornadas parciales, que se rebajará a máximo 27 horas, y las jornadas especiales del sector de transporte, que se propone rebajar a 160 horas mensuales, las que no tendrán aplicación escalonada y se harán efectivas al quinto año de publicada la ley. Otra característica, es que la misma ley establece que la reducción de jornada no podrá implicar en ninguna circunstancia una disminución de las remuneraciones”.

Flexibilidad

Desde distintos ámbitos, los expertos han planteado que la propuesta debe incorporar elementos de flexibilidad laboral para que ambas partes, tanto empresas como trabajadores, puedan pactar horarios y jornadas adaptables.

Parte de ello se abordó en el Encuentro de Irade Biobío “Cambio de switch: 40 horas, inclusión y trabajo híbrido”, en cuya mesa inicial participó Giorgio Boccardo, subsecretario del trabajo. La autoridad se refirió a elementos de su aplicación y la flexibilidad necesaria por parte de todos los involucrados.

“El riesgo que puede representar es el impacto en la productividad, que en Chile es un hecho irrefutable que es muy baja, y el eventual incremento de costos para algunas pequeñas y medianas empresas”. Boris Fiegelist, director de Derecho de Unab.

“Las jornadas excepcionales van a tener un sistema de días compensados. En los trabajos donde hay que tener los turnos funcionando se va a ir acumulando días de descanso, todos van a verse beneficiados con esta ley. En el caso del sector público se va a ingresar una discusión sobre la reducción de jornada y en ello se apunta que en el estatuto administrativo y los asistentes de la educación y funcionarios públicos avancen hacia una reducción teniendo en cuenta que hay dispuesto fondos públicos”, sostuvo Bocardo.

Asimismo, agregó que “nos consta que muchas empresas han ido adelantando estos procesos y en la medida que se apruebe este proyecto exista una reducción gradual. Además, es importante señalar que abarca todas las formas laborales y se va a establecer una mesa que se enfoque en el sector público para avanzar también en la reducción de este sector. Estamos planteando políticas de corresponsabilidad también para que sea equiparada la reducción de horas”.

En el mismo encuentro intervino Pablo Gómez, socio de Personas y Organizaciones de PwC Chile, quien manifestó que “cada organización, con sus propias características, va a tener que ajustarse a la realidad de la nueva modalidad de cómo vamos a seguir trabajando. Sin embargo, cuando hablemos de opción de la modalidad de teletrabajo, no todos podrán hacerlo, entonces mejor hablar de flexibilidad laboral”.

Tiempo y calidad

Además de la discusión en marcha en el parlamento, existe otra que tiene que ver con la calidad del trabajo y el temor ante una menor producción, en la lógica matemática de que “a menor horario menor producción”. 

Ivonne Maldonado, directora de Psicología en la Universidad de Las Américas, sostiene que “quizás el temor más inconsciente es a entregar oportunidades a las personas a ser más felices, con mayor libertad, seres humanos más empoderados, que tengan tiempo para el ocio, la creatividad o las fantasías. Es muy complejo que las personas construyamos una sociedad feliz si no hay tiempo para disfrutar en familia, conocer a tu vecino, generar instancias de organización comunitaria. Pues es ahí donde podemos tener ganancias, que contribuirán en la disminución de patologías asociadas a salud mental, así como también a la disminución de accidentes laborales. Desde esta mirada, creo necesario ampliar el foco de percepción, centrándose en que a largo plazo traerá mayores recompensas que gastos”.

Sobre la distribución del tiempo libre, una encuesta de Trabajando.com señaló que un 51% prefiere que la modificación de horas laborales se traduzca en trabajo de lunes a jueves, mientras que un 31% se inclina por una flexibilidad, según sea la necesidad de la empresa o producción.

“Creo que como sociedad debemos poner énfasis en lo realmente importante, pues nos pasamos la vida esperando tener bienes para disfrutar e hipotecamos la felicidad, olvidándonos que ésta no es una meta y menos aún la adquisición de alguna cosa. Debemos romper el mito de que mientras más horas trabajamos, ganaremos más dinero y eso nos hará feliz, ya que esa ilusión conduce una sociedad agotada y frustrada que busca afuera algo que sólo se puede obtener desde su interior”, agrega Maldonado.

“En las ventajas, podemos mencionar los impactos directos en la salud y bienestar de los trabajadores, permitiendo mayor espacio para un adecuado descanso y recuperación, lo que disminuye la fatiga, los errores, la accidentabilidad, el ausentismo y los conflictos entre la vida personal y laboral”. Yenny Pinto, académica UCSC.

Empresas reciben sello 40 horas en Concepción

Si bien aún el proyecto de las “40 horas” no cuenta con luz verde para su puesta en marcha, hay empresas que se han adelantado a la discusión parlamentaria y han optado por reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas.

DIJASE Ltda.; Lavín Fire Protection; LIEM Ingeniería; y Pinturas y Manualidades Colo-Colo, fueron las empresas que recibieron el Certificado Sello 40 Horas, en una ceremonia que tuvo como protagonistas a los trabajadores.

Para postular y obtener este reconocimiento, las compañías debieron cumplir con requisitos como tener contratado, conforme a la normativa del Código del Trabajo, a lo menos al 80% de los trabajadores y trabajadoras con una jornada ordinaria que no supere las 40 horas y que no sea menor a 30 horas semanales; no haber sido condenada por vulneración a los derechos fundamentales; y, estar al día en el pago de las obligaciones previsionales de sus trabajadoras y trabajadores.

“Más que en lo laboral, la mejora es emocional y se agradece, ya que uno tiene hijos y ahora tenemos más tiempo. Se nota una evolución en el estado anímico de los trabajadores, ya que ahora podemos hacer otras cosas”, contó Bárbara Peña, trabajadora de la empresa Lavín Fire Protection.