Diálogo

Toma de posesión de Monseñor Sergio Pérez de Arce

Cerca de mil fieles se congregaron en la Catedral de la Santísima Concepción para presenciar la toma de posesión canónica. El nuevo arzobispo llamó a la comunión, el cuidado mutuo y la justicia, subrayando la misión evangelizadora de la Iglesia y su papel en la sociedad.


Cerca de mil fieles se congregaron en la Catedral de la Santísima Concepción para presenciar la toma de posesión canónica. El nuevo arzobispo llamó a la comunión, el cuidado mutuo y la justicia, subrayando la misión evangelizadora de la Iglesia y su papel en la sociedad.


Por Priscila Torres R.

En procesión junto a obispos de distintas diócesis del país, Monseñor Sergio Pérez de Arce Arriagada llegó el sábado 6 de julio hasta una Catedral de Concepción repleta de fieles, que se congregaron para presenciar su toma de posesión canónica como arzobispo de la Arquidiócesis de la Santísima Concepción, en un evento significativo para la comunidad católica local.

Tras los ritos iniciales de la Santa Misa, el Pbro. Claudio Soto, vicario judicial de la arquidiócesis, presentó y proclamó la bula papal que nombraba oficialmente a Monseñor Pérez de Arce como el nuevo arzobispo. Posteriormente, en representación del Papa Francisco, el arzobispo de Santiago, Monseñor Fernando Chomali, impuso el Palio arzobispal sobre los hombros del nuevo prelado, simbolizando así su investidura y unión con la Iglesia Universal.

En un acto lleno de significado, quien fuera el administrador diocesano de Concepción, Monseñor Bernardo Álvarez, entregó el báculo pastoral a Monseñor Pérez de Arce. Este, al tomar asiento en la sede, recibió el saludo respetuoso de los sacerdotes de la arquidiócesis, así como de religiosas y laicos. Las prioras de las Carmelitas y Trinitarias también ofrecieron su saludo, representando a las órdenes religiosas de la región.

“Reiteramos nuestra gratitud a Dios por la jornada vivida. La celebración eucarística fue preciosa y fraternal, un augurio positivo para el nuevo ministerio del arzobispo. Monseñor ha enfatizado que debemos poner nuestra misión en manos de Dios y trabajar en corresponsabilidad. La evangelización sigue siendo nuestra misión primordial”.

Mons. René Rebolledo, Presidente de la Conferencia Episcopal.

Llamado a la comunión, cuidado y justicia

Durante su homilía, Monseñor Pérez de Arce hizo hincapié en la importancia de caminar juntos, afirmando: “Lo más importante de la Iglesia sucede en la vida local: en cada comunidad, en cada parroquia, colegio, movimiento. Allí conocemos el evangelio, allí oramos, nos ayudamos como hermanos, celebramos la fe y salimos al encuentro de los que sufren”.

El arzobispo de Concepción, abordó el tema de los abusos de poder, de conciencia y sexuales, subrayando que este no es un problema del pasado. Las lecciones aprendidas deben convertirse en una pastoral permanente. “Debemos cuidarnos unos a otros, especialmente a los más pequeños y vulnerables, en una Iglesia donde exista una cultura del cuidado y del buen trato”, expresó con convicción.

Al referirse a los desafíos de la comunión con la sociedad y los retos de nuestra patria y del mundo, el arzobispo recordó la importancia de discernir la voz de Dios en los signos de los tiempos y ser fermento en la masa. “La evangelización, dar a conocer a nuestro Señor, sigue siendo nuestra misión primordial”, recordó.

En sus palabras finales, Monseñor Pérez de Arce hizo un llamado a centrar las discusiones en la persona humana, alentando a todos a preocuparse especialmente por los más débiles. En una sociedad marcada por la indiferencia y el conflicto, instó a soñar con la construcción conjunta de la justicia y la paz.

“En los colegios del Arzobispado, confiamos en que la experiencia de Monseñor Sergio Pérez de Arce será fundamental para enfocarnos en el bienestar y desarrollo de nuestros 10,500 estudiantes. Nuestro objetivo es trabajar juntos para seguir avanzando y mejorando la calidad de la educación en Concepción y en toda la Región del Biobío.”.

Luz María Acle, Directora Ejecutiva de las Fundaciones La Asunción y Cristo Rey.

Relación entre la Iglesia y la Academia

La toma de posesión también marcó un momento importante para la Universidad Católica de la Santísima Concepción, donde Monseñor Pérez de Arce asumió como Gran Canciller, así como para los colegios del Arzobispado de la Santísima Concepción. La presencia de autoridades universitarias y de las fundaciones educacionales subrayó la estrecha relación entre la Iglesia y la academia.

El arzobispo destacó la importancia de conocer la realidad de la Iglesia local antes de delinear un plan pastoral: “En esta mañana no les voy a compartir ningún plan de acción o plan pastoral para la Arquidiócesis. Primero, porque la homilía no es el momento para hacerlo, pero además porque en este primer tiempo hay que conocer la realidad de esta Iglesia local e ir buscando juntos, a través del diálogo y el discernimiento, lo que el Señor nos está pidiendo”.

“El nuevo arzobispo destacó que la Iglesia debe ser un todo y no se puede entender desde una perspectiva individualista. Su mensaje reflejó el carisma de los Sagrados Corazones. Me conmovió cuando citó al padre Esteban Gumucio. Veo con esperanza su llegada”.

Rodrigo Díaz Worner, Gobernador Regional del Biobío.

Asimismo, instó a la comunidad a valorar su vocación cristiana y el camino común en la Iglesia. “Nuestra comunión en la fe nace del gran amor que Dios nos tiene, de la voluntad de Jesús de regalarnos su amistad y esa vida nueva que brota de su corazón misericordioso, de la obra del Espíritu que nos habita y nos alienta con su soplo divino”, afirmó.