Abogado Mauricio Duce y seguridad pública: “Lo primero, y más importante, es que hay que dejar de hacer tonteras”

Critica a aquellos que dicen que ya pasó el tiempo de los diagnósticos y que ahora se debe pasar a la acción. Plantea que comprender los fenómenos criminales que hay detrás de cada delito es fundamental para diseñar medidas adecuadas, las que requieren un plan de implementación y evaluación. 


Por Cecilia Díaz R.

En seguridad hay que actuar igual que en el ámbito económico. Hacer un diagnóstico, implementar medidas basadas en evidencia, evaluar y corregir si es necesario. Por el contrario, según Mauricio Duce Julio, abogado, académico y director del Programa de Reformas Procesales y Litigación de la U. Diego Portales, el debate hoy en Chile está plagado de tonteras y medidas sin sustento. Dice que solo en los dos últimos años se han dictado 69 leyes vinculadas a seguridad sin que observemos resultados.  

Magíster en Ciencias Jurídicas de la U. de Stanford, tiene numerosas publicaciones en justicia criminal, sistema procesal penal y justicia penal juvenil. Fue secretario del equipo técnico que redactó los proyectos de ley de la reforma procesal penal y ha sido profesor en universidades de América Latina, Estados Unidos y Europa.

Tiene una mirada crítica de la discusión sobre seguridad que se ha dado en Chile. Se opone a quienes plantean que ya pasó el tiempo de los diagnósticos y que ahora debemos pasar a la acción. 

“La primera cuestión es que todavía tenemos que seguir trabajando en perfeccionar nuestra comprensión de los diagnósticos, de cuáles son los fenómenos criminales que se encuentran detrás de las distintas categorías de delito. Que las propuestas que hagamos estén basadas en evidencia, que sean cosas que puedan producir resultados. Que las medidas que se adopten no sean sólo reformas legales”, plantea.

En caso de que sean leyes, “tienen que venir con un plan de implementación y de evaluación”.

Dice: “Entre 2021 y 2023 se aprobaron 69 leyes vinculadas a temas de seguridad. ¿Qué pasó con esas leyes? ¿Han producido los resultados o estamos perdiendo tiempo? Bueno, nada de eso estamos haciendo muy seriamente. La política pública en materia de seguridad tiene que ser como la política pública económica. Tú adoptas medidas, tienes que evaluarlas, seguirlas y ver si produjeron resultados, porque si no, tienes que corregir”.

“Podríamos estar descorchando champaña y celebrando que disminuyeron los homicidios y, en realidad, la razón por la que hayan disminuido es porque tenemos un problema de crimen organizado consolidado, que es un problema mayor”

Diversos fenómenos

– ¿Ha aumentado la inseguridad en el país o, como piensan algunos, es más bien un tema de los medios que exageran eventos puntuales?

– Para hacer un análisis más completo hay que distinguir distintos fenómenos. No es una respuesta única. Y en parte, el problema del debate público es que tiende a buscar respuestas en blanco o negro. Para hacer una respuesta más completa, hay que considerar distintas fuentes de información respecto a distintos tipos de delitos.

Explica: “en los delitos más tradicionales, que solían llamarse de mayor connotación social, que involucran fundamentalmente todos los tipos de robos (…) la mejor forma de medir qué es lo que está pasando con esos delitos es lo que se denomina encuesta de victimización. Es decir, preguntarle a la persona si en un periodo anterior a la encuesta ellos o su familia han sido objeto de alguno de estos delitos. En Chile tenemos un instrumento bastante validado que es la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana, la ENUSC, que se viene haciendo desde el año 2005”.

– ¿Qué muestra la ENUSC?

Se ha venido produciendo una disminución en el porcentajede hogares y de personas individualesque han sido víctimas de estos delitos. No es una bajada, por así decirlo, única, sino que desde el año 2005, más o menos hasta el 2013, se produjo una baja importante. Luego hubo una pequeña subida en el 2014. Desde el 2017 en adelante ha venido una baja. Para estos efectos hay que descontar 2020 y 2021. Para cualquier estadística en materia criminal tú tienes que sacar 2020 y 2021 en la ecuación. Incluso parte del 2022 todavía está teñido por la pandemia. Especifica: “Si en el 2005 la tasa de victimización era superior al 38%, hoy es de 21.8%”.

Homicidios y secuestros

La realidad cambia cuando se trata de otro tipo de delitos, como homicidios y secuestros.

“Hasta hace muy poco mediamos los homicidios en Chile con distintas fuentes estadísticas, el Ministerio Público tenía, las policías tenían, el Servicio Médico Legal tenía otra, pero se hizo un esfuerzo: el Centro para la Prevención de los Homicidios y Delitos Violentos que es una iniciativa que empezó a funcionar hace poco más de un año, de tratar de tener una cifra homologada de todas estas instituciones. Ellos produjeron su primer informe estadístico que cubre los años 2018 a 2022”.

– ¿Qué dice el informe?

 – Tenemos datos homologables de un par de años antes y lo que te vienen mostrando los datos es que, en materia de homicidios, a partir del año 2016, pero con mucha fuerza a partir del 2019, comienza a crecer la tasa. La mejor fórmula de medirlo es homicidios por casi mil habitantes, para que sea comparable efectivamente; allí donde en 2016 tuvimos una tasa de 4.2 homicidios por casi mil habitantes, al año 2022 tuvimos una tasa de 6.7, o sea, un incremento importantísimo.

“Si en 2016 más o menos había 800 homicidios, en el 2022 tuvimos 1.322. Entonces ahí ha habido un incremento significativo que fuertemente se disparó a partir del 2019 y se consolidó en el 2022”.

– ¿Qué es lo que sabemos sobre el 2023?

– Todavía no hay cifras consolidadas, porque se requiere que varias instituciones junten las cifras, pero algunas parciales indican (por ejemplo, las cifras de las policías que registra la subsecretaría de Prevención del Delito) que, al tercer trimestre del año pasado, comparado con el tercer trimestre de 2022, ese año teníamos marginalmente un poco más de homicidios. Algunas cifras que se han dado a conocer informalmente (aún no hay un informe oficial), es que incluso podría ser que termine consolidándose una pequeña baja en los homicidios del año 2023. Todavía, por cierto, es muy temprano para interpretar qué es lo que efectivamente está pasando, si es producto del éxito de la implementación de algunas estrategias para lidiar con el homicidio o no.

Lo otra explicación podría estar en la consolidación de una banda. “Tal vez las bandas que se están disputando el territorio, ya una lo ganó. Una vez que las bandas lo ganan, lo que demuestra la evidencia internacional es que disminuye la violencia, porque hay control territorial. El crimen organizado no quiere, no vive de los homicidios. Los homicidios son un medio para lograr control territorial. Entonces, podríamos estar descorchando champaña y celebrando que disminuyeron los homicidios y, en realidad, la razón por la que hayan disminuido es porque tenemos un problema de crimen organizado consolidado, que es un problema mayor”.

En términos generales, plantea: “la percepción de que hay más homicidios es completamente correcta y no es una pura cuestión de los medios, sino que corresponde con la evidencia empírica que tenemos que, además, nos muestra que ha cambiado la modalidad en que se cometen los homicidios”.

“Hay mucha mayor presencia de armas de fuego, entonces, probablemente esto hace que también los homicidios tengan un mayor nivel de espectacularidad por así decirlo, y de visibilidad que lo que tenían antes”

– ¿En qué ha cambiado?

– Ha aumentado muy fuertemente la presencia de armas de fuego. El 2017, un 40% de los casos tenían armas de fuego, al 2022 más de un 54% tuvieron. Han cambiado los lugares donde se cometen los homicidios, el 2016-2017 la mitad de los homicidios se cometían en lugares públicos, en las calles, el año 2021, un 65% se cometió en las calles. También ha aumentado fuertemente la cantidad de homicidios en donde desconocemos la identidad del imputado. Todo esto sugiere que hay un porcentaje de homicidios que ha mutado; de una situación que antiguamente estaba compuesta por peleas, riñas, situaciones de contextos intrafamiliares ha mutado a algún tipo de conflicto entre bandas. Potencialmente puede ser un indicador de mayor presencia de organizaciones criminales.

Complementa: “hay mucha mayor presencia de armas de fuego entonces, probablemente esto hace que los homicidios tengan un mayor nivel de espectacularidad y de visibilidad que lo que tenían antes”.

“Ha habido un aumento de secuestros, que es un delito que genera mucha preocupación ciudadana y probablemente también ha habido cambios de modalidades, a secuestros extorsivos, que son los que mayor preocupación generan en la ciudadanía”.

-¿Qué es necesario hacer hoy con urgencia hoy?

 – Lo primero, y más importante, es que hay que dejar de hacer tonteras. Y lamentablemente, el debate público en materia de seguridad ha estado plagado. Hay demasiadas tonteras. Es un debate que, lamentablemente, ha perdido la perspectiva de transformarse en un debate de Estado y se ha transformado en un tema extremadamente politizado por todos los lados. Entonces, lo que uno ve, más bien, es una cierta lucha política de aparecer muy eficiente, muy duro, haciendo cosas, pero cosas que no tienen ni mucho fundamento en la evidencia que disponemos ni que tampoco tienen muchas posibilidades de salir adelante.

 Comenta: “Ha habido una visión muy basada en la pura reforma legal, como si la ley fuera a cambiar la realidad. Esto no quiere decir, obviamente, que la ley no pueda ayudar a muchas cosas, la ley puede ser el punto de partida de transformaciones institucionales, pero hay una competencia y básicamente el gran indicador de quién es el mejor en contra de la delincuencia es cuántas leyes se aprueban.

Añade: “¿Leyes para qué? ¿Leyes sobre la base de qué diagnóstico? ¿Leyes que producen qué resultados? ¿Evaluamos, hacemos seguimiento? Se están instalando tonteras en el debate público, como esta idea, por ejemplo, de que ya pasó el tiempo de los diagnósticos y ahora es el tiempo de la acción. Bueno, sin diagnósticos, sin entender bien el fenómeno criminal que hay detrás de estas modalidades de delito, es muy difícil que diseñes alguna respuesta”.